El caso Pegasus reveló que un malware, desarrollado y pensado en principio para la lucha contra el crimen organizado y el terrorismo, puede ser usado finalmente para espiar a periodistas, activistas y opositores políticos.
Este malware tiene la capacidad de acceder a las cámaras, micrófonos, chats y todos los archivos de los dispositivos infectados. Por eso, con su destape en el 2017, alarmó a gran parte del mundo.
¿Cómo capturan nuestra información las grandes empresas? ¿También nos espían por medio de nuestras cámaras, micrófonos o incluso Google Home o Alexa?
Mira este video y atent@ a lo que nos cuenta Jaime Tan, máster en ciberseguridad.